Llevar horas en pausa y en la misma postura bloquea los músculos. Haga estos deberes antes de meterse en la cama
“Haga una prueba: intente cualquier ejercicio de flexibilidad en este mismo instante. Repítalo nada más levantarse y verá que le cuesta mucho más”, asegura el entrenador Marcos Flórez. Así, conviene ejercitar el cuerpo cada noche, al borde de la cama, con el fin de que los movimientos durante la jornada del día siguiente sean más fáciles y placenteros.
Para empezar, caliente los músculos simulando que camina, sin moverse del sitio, elevando las rodillas a media altura. Muévase durante un par de minutos. Si quiere, también puede mover los brazos y los hombros, haciendo círculos o de lado a lado. Después, comience con los seis primeros ejercicios que exponemos a continuación, repitiendo el circuito hasta tres veces. Una vez completado, termine con los movimientos de los vídeos número 7 y 8.
1. FLEXIÓN DE TRONCO CON ROTACIÓN
Tumbado bocarriba, cruce la piernas posando un tobillo sobre la rodilla contraria. Con una mano detrás de la oreja y el otro brazo estirado, flexione el tronco dejando la parte baja de la espalda siempre en contacto con el suelo a la vez que lleva un hombro ligeramente hacia la rodilla contraria. Si sube demasiado sentirá cómo trabaja la parte anterior del muslo más cercana a la cadera. Evite pegar la barbilla al pecho. Suelte el aire al flexionar el tronco y tómelo para volver a la posición inicial. Haga una serie de 12 repeticiones de cada lado y, sin descansar, pase al siguiente ejercicio.
Fuente: El País